17 de abril de 2012

Las radios municipales.

LAS RADIOS MUNICIPALES “AL AIRE”
Los recortes de los Ayuntamientos amenazan la continuidad de las emisoras locales y de los puestos de trabajo que estas generan.

Las emisoras de radios municipales, asociadas en la provincia de Valencia a la “xarxa d’emisores municipals valencianes” suman un total de 21 emisoras. Es cierto que el mito de que las emisoras locales son “cajas de música” está bastante instaurado en la sociedad, pero poco a poco este mito se va desvaneciendo con el incesante trabajo de las radios municipales por mejorar, que ahora y gracias a internet, llegan a un mayor número de oyentes y ofrecen una programación elaborada y variada.

Estas emisoras cumplen varias funciones entre las que Jordi Coll, el director y responsable de Radio Godella, destaca “la información local que se hace llegar a los vecinos del pueblo, los programas musicales de músicos poco comerciales y la satisfacción de las inquietudes de los vecinos por hacer radio, por lo que el ayuntamiento lo que hace es brindar un servicio más al pueblo”.

La situación económica en la que vivimos afecta también a los consistorios municipales, que se ven obligados a realizar recortes en sus presupuestos, a mancomunar servicios (recogida de basuras, transporte público…).

Las emisoras amenazadas

El fantasma de los recortes presupuestarios revolotea sobre las emisoras de radio municipales. En tiempos de crisis todos se ven obligados a apretarse el cinturón, y como no, también los entes públicos. Las emisoras municipales tienen una larga tradición en nuestra comunidad, (algunas tienen más de 20 años de recorrido) y son, en la mayoría de los casos “una herramienta fundamental para hacer pueblo y tener a este informado de todo lo que ocurre en el Municipio” nos dice Jordi Coll.

Alguna emisoras sobreviven con una partida presupuestaría que tan sólo contempla el sueldo del trabajador que la dirige “por lo que es muy complicado comprar material y hacer una programación completa, con boletines informativos y programas de mayor calidad” comenta J. C. mirando de reojo un viejo ordenador que utiliza para programar y que está colgado por segunda vez desde que hemos llegado a los estudios.

En este sentido, el hecho de que el gasto “en material fungible sea mínimo hace que estemos tranquilos en cuanto a que nos puedan afectar los recortes” asegura María Sisamón del departamento de comunicación del Ayuntamiento de Burjassot.

El miedo a que pase lo que ha sucedido en Aldaia, (una radio con un presupuesto entorno a los 150.000€ que ha desparecido) no es el único factor que afecta a las radios municipales, los colaboradores son la piedra angular de estas emisoras y su función es altruista, no reciben nada a cambio de realizar los programas de la emisora y al final, si no son bien tratados terminan por dejar sus espacios vacíos.

Para que la programación sea variada, es fundamental que alguien realice los programas, y ellos son los colaboradores y locutores de los diferentes programas.

En una radio en la que no hay presupuesto “que la gente venga para hacer radio, y se esfuerce cada semana en realizar un programa es elogiable” nos dice Coll. Los colaboradores se muestran muy agradecidos a la emisora por la oportunidad que esta les brinda de realizar un espacio en el que tratar los temas que siempre les han gustado, sin las presiones de las emisoras generalistas, publicidad o audiencias. Jorge Martínez, uno de los colaboradores se muestra “agradecido de poder realizar mi programa libre de presiones económicas y políticas” y como no “de difundir este espacio a todo aquel que lo quiera escuchar” y más ahora que la mayoría de radios emiten ya a través de internet y tienen en podcast (un almacén digital de programa) cada uno de sus espacios, por lo que la difusión es mucho mayor.

“Hemos intentado buscar vías de financiación para la propia emisora, que la publicidad que ingresemos se reinvierta en la emisora para ayudarla a mejorar y crecer, pero al ser pública no nos lo permiten” opinión en la que coinciden Coll y Martínez, que se miran con resentimiento, pero aún a pesar de la situación las radios se encuentran en mejor situación que hace 15 años, pero queda mucho camino por recorrer.

Desde el departamento de comunicación del Ayuntamiento de Burjassot, ente encargado de que la radio de ese municipio esté en marcha, tratan de hacer que la radio del pueblo “sea del pueblo y para ellos, que estén informados de todo lo que ocurre y que participen en ella”, y partiendo desde ese objetivo “aunamos esfuerzos para que sea así y que la gente escuche nuestra emisora”.

Las radios deben ser un instrumento eficaz para la vida del pueblo, una herramienta de información y entretenimiento que sirva para el desarrollo del mismo a través de una programación variada (musical, informativa, deportiva…) y para ello es necesario que los ayuntamientos apoyen a las emisoras, al fin al cabo la radio municipal es para el ayuntamiento una herramienta más para difundir sus programas, ayudas, actos… y no deberían dejarlas “al aire”.